Los gulaps del régimen democrático, permitidos por cada gobierno y cada político que se sienta en el Congreso y en el Senado.
Dime un político que diga una verdad y te diré un hombre que miente. Nuestra clase política es la ruina de la nación española y de sus comunidades. El caso de los guardias civiles democráticos es un ejemplo palmario aderezado por actos delictuales cometidos desde el estado como la "Operación Columna".
El demonio no es tan malo ni Dios es tan bueno.
El titular de hoy nos sitúa en el campo de la maldad y de la bondad, y sobre todo en la parcela del servicio a la comunidad o servirse de ella. A estas alturas de rodamiento por las calles de la democracia fundamentada en el texto vigente del año 1978, ya tenemos conocimiento y mayoría de edad para poder lanzar al aire nuestra opinión y nuestro diagnóstico sobre sus aciertos y sobre sus errores, haremos un resumen muy básico para que nos sirva de referente.
Nos vamos a servir de una vieja historia de un vecino de un pueblecito muy pequeño de Galicia, que tenía que atravesar un rio para ir a la tasca de al lado y lo materializaba haciendo equilibrios de una orilla a la otra sobre un tronco y, para no caerse decía lo siguiente para encomendarse al bien y al mal: «Ni o demo e tan malo, ni Deus e tan Bo», que traducido nos indica: «Ni el demonio es tan malo ni Dios es tan bueno».
Traducido lo anterior a la clase política, tenemos que añadir y de nuestra propia cosecha, no hay ningún político malo ni político alguno bueno, todos van a lo mismo a vivir del cuento como si España y los españoles fueran sus siervos y ellos los dueños de sus vasallos servidores esclavos.
Puede parecer atrevido, puede parecer brusco, pero es la realidad, en vez de solucionar los problemas de la comunidad, de sus convecinos sólo se preocupan de llenar la bolsa, y llevárselo sin la menor verguenza y sobre todo con el amparo legal de sus bandas y protegidos.
Al caso y como ejemplo, El Tribunal Europeo de Derechos Humanos condenó a España por delitos muy graves, en la célebre sentencia 69966-01, por delitos de detención ilegal en masa hechos por la Guardia Civil, además la sentencia señaló tajantemente que la Guardia Civil no era una institución de carácter militar, entre otras cuestiones que son para dar lecciones en las facultades de nuestras universidades. El Tribunal Constitucional de España, hizo algo parecido reconoció que la Unión Democrática de la Guardia Civil promovida por los demócratas de la Guardia Civil era una asociación profesional legal, sin que ello tuviera efecto alguno en la Institución ni en los guardias civiles democráticos que además de ser expulsados de la institución, fueron encarcelados por delitos imposibles de cometer como era el de sedición militar, además de ingresar a cientos de ellos… en los «Gulaps o psiquiátricos del régimen vigente». El régimen democrático que eliminó por vía de hecho las libertades, la carta constitucional y el derecho de asociación.
Hace de todo ello más de treinta años, pero como decía alguno la memoria de los muertos siguen en los vivos, somos unos cuantos los que seguimos vivos, sufrimos la dictadura y la persecución de la democracia secuestrada por los mandarines de nuevo cuño. Esos políticos que se enriquecen de manera vergonzante a cuenta de la pobreza de todos los españoles de a pie. Esos políticos representados por cada gobierno que nos ha mal gobernado, cada sustituto venía a lo mismo, a enriquecerse y a olvidar sus obligaciones, servir a sus convencinos a sus ciudadanos.
Para ir finalizando: Las sentencias en España van por el camino de la política, todos obedientes, las sentencias del TEDH, las del TC, sólo se aplican y rápido para los delincuentes y asesinos. Las resoluciones parlamentarias aprobadas por el congreso de los diputados y de forma reiterada igual, el gobierno de turno sigue haciendo de su capa un manto, los guardias civiles detenidos ilegalmente, expulsados por el ejercicio de actos legales como es el de asociación, solicitado pacíficamente y por el conducto reglamentario siguen expulsados, y el estado de derecho social y democrático siendo pateado, con el asombro de toda la sociedad.
Terminado Ya. Ahora llega el momento de la amnistía para unos españoles de cataluña, sirve de ejemplo para la sociedad, si quieres algo, no imites a los guardias civiles democráticos que sin armas y pacíficamente ejercían su derecho de expresión, de asociación etc. El pacifismo, el cumplir con el texto constitucional, el creer en el estado de derecho, no les sirvió para nada, solamente para ser detenidos por delitos imposibles de cometer porque el ordenamiento constitucional no los prohibía, para ser expulsados de sus puestos de trabajo, para que todo el estado arbitrara y protegiera a los corruptos y delincuentes que desde el estado y sin autorizaciones legales algunos llevaron a cabo operaciones como la «Operación Columna» contra todos y especialmente contra la parte fundamental de nuestro texto constitucional como es la dogmática que protege los derechos y libertades fundamentales de cada ciudadano español.
Como decía hace años ese anciano de la Cañiza — Galicia–, «Ni el demonio es tan malo ni Dios es tan bueno,» con una excepción; la clase política española toda es increiblemente mala, muy mala, y terriblemente sospechosa. No la crean nunca, son gente que son capaces de todo por seguir chupando del poder, ahora hablan de amnistiar a los guardias civiles democráticos, cuando su deber es aplicar las sentencias de los altos tribunales volviendo sobre sus propios actos, y sobre todo aperturar una comisión de la Verdad sobre los delitos de lesa humanidad cometidos por medio de operaciones especiales delictuales como la «Operación Columna».